Convicción; la madre de toda inversión.
Cuando te adentras en el mundo de la inversión, lo normal es verte sumergido en un mar de dudas. Como cuando inicias cualquier proyecto en tu vida, te sientes abrumado por toda la información relativa a ello y piensas que te vas a estrellar.
El mundo de las inversiones no escapa a esta tela de araña. Lo normal al principio es sentirte muy perdido, no saber definir cuál es el estilo de inversión que más se adapta a tu personalidad, no tener establecida una estrategia de inversión, etc.
Parto de la idea de que si inviertes, al menos tienes claro cuál es tu horizonte temporal de inversión. Es decir, con qué objetivo inviertes tu dinero y qué tiempo estás dispuesto a tener bloqueado ese dinero en tu cuenta de corretaje.
Pero, como todo en esta vida, puedes tener tus principios muy claros, y aún así cometer errores. De hecho, yo cometí muchos fallos al principio, entre los que destaco dos:
-Impaciencia. Querer comenzar a invertir YA. Lo que me llevó a comprar algo que no analicé y que no conocía. Compré 2 acciones de Alibabá (NYSE: BABA) sin haber analizado el negocio. Consecuencia —> perdí el 40% de la inversión. Por suerte el impacto en mi cartera fue mínimo.
-Falta de convicción. Me dejé llevar por los alientos de Fintwit sobre Dye & Durham (TSX: DND) y, aunque me parecía y me sigue pareciendo un negocio increíble, no estaba convencido al 100% sobre la inversión. Y aún así la hice. Consecuencia —> perder el 50% de mi inversión y vender casi en el peor momento.
Este segundo error si que afectó en mayor medida a mi cartera, y a la rentabilidad de la misma.
En el mismo periodo analicé otra empresa maravillosa, International Money Express (NASDAQ: IMXI) que SÍ entendía al 100%, con mucho mejor historial, directiva y mejores cuentas, pero la deseché en ese momento por no tener juicio crítico propio.
¿Consecuencia? International Money Express se encuentra hoy +60% desde que publiqué la tesis en mi substack allá por febrero de 2022, y aún así se encuentra muy infravalorada.
Perdí un -50% de mi inversión cuando podría estar a día de hoy en +60%, y todo por la falta de convicción en lo que estaba comprando.
Sabía que el modelo de negocio de Dye and Durham era y es espectacular, pero no confiaba al 100% en el equipo gestor, por lo que decidí invertir en ella, traicionando uno de mis principios de inversión.
Me quedé con cara de estúpido cuando vi que la compañía no hacía nada más que caer tras el anuncio de la posible adquisición de Link Group, y aún así mantuve la posición.
Lo que quiero que veas es que la convicción y el juicio propio es FUNDAMENTAL para triunfar en el mundo de las inversiones. Puedes ser el tío más listo de Wall Street, pero si no tienes convicción en lo que haces, no ganarás dinero en bolsa.
Aislarte del ruido de Twitter, de tu círculo social, del que no opina igual que tú, es fundamental para tener éxito. Siempre y cuando sepas al 100% lo que estás haciendo.
Si una de tus empresas/fondos cae un 50%, pero tienes convicción al 100% de que al negocio no le pasa absolutamente nada, o que los problemas que presenta son pasajeros y no afectará al negocio a largo plazo, y consigues aumentar violentamente tu posición en el, seguramente acabes ganando mucho dinero si tienes la paciencia y la convicción en el negocio.
Formarse está muy bien y es muy necesario antes de empezar a invertir en bolsa, pero donde de verdad se aprende es comenzando a invertir. No hay que demorar en exceso el comenzar a invertir ya que eso es lo que te va a dar la experiencia para saber navegar todo tipo de situaciones que se te presenten a lo largo de tu vida como inversor.
Y mira que puedes leer por ahí cientos de veces de que es mejor aprender de los errores de los demás. Discrepo. Cuando cometes tú los errores aprendes 10 veces más que si te los dice otra persona.
La falta de convicción en tus inversiones te llevará a vender en el peor de los momentos, a frustrarte profundamente y a sentir que esto de la bolsa no es para tí, cuando en realidad lo que te falta es un método que seguir y CONVICCIÓN en lo que estás haciendo.
Si en tu vida diaria se te presenta cualquier situación, por ejemplo comprarte una vivienda, y no estás convencido al 100% no lo haces, ¿por qué con la bolsa si? Es tan sencillo como aplicar estas analogías y el problema casi habrá desaparecido.
Yo te dejo lo dos errores de los que más he aprendido y más dinero me han costado. Otro día hablaremos de los aciertos, que también hay algunos por ahí, no todo va a ser negro.
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Sin más, un saludo y buen resto de fin de semana.